Alexander Flores, “tiene
plata, es minero” puede comprar votos. Es el comentario de los líderes de
opinión. En su gira de promoción actual,
el candidato a la presidencia regional por Poder Andino, confirma esta
aseveración. Se dice que regala toros y motos.
Estos actos revelan un
problema político grave para la campaña de Flores: los mineros en general
proyectan un estilo de vida, superior a
cualquier mortal de Puno, lo que le aleja de los miles de votantes que acudirán
a las urnas (de esto se dio cuenta Juan Luque y le acusó de quitarle
candidatos ofreciéndole dinero).
La imagen de Alexander
Flores la construyen los electores, a partir de lo que hace, dice y se forman
una opinión con lo que otras personas hablan de él, es así, poco a poco, van construyendo su
imagen. Así, cambiar esa reputación será
difícil, pero no imposible:
mostrando a las personas sus buenas cualidades y sobre todo la sinceridad. Un
pequeño cambio no hace daño. Tres cosas deberá evitar: los actos masivos (que
no parezcan pagados), el copamiento de los medios de comunicación y la guerra
sucia (como los partidos de la derecha).
Y, como a Juan Luque, no le
conviene asistir a entrevistas y debates, la mejor estrategia de marketing a la
que debe recurrir es el “Boca a boca”, aprovechando su energía y su carisma. Pero, para llegar al
sillón regional tendrá que quitarse ese “Estigma de minero millonario”.
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